sábado, 1 de agosto de 2015

Un Buen Chico




Javier Gutiérrez
Editorial Mondadori
ISBN: 978-84-397-2566-4

Vayamos por partes antes de meternos en harina, no hagáis caso a la contraportada del libro porque puede que frustren vuestras esperanzas de encontraros lo que en realidad no hay porque novedoso no creo que sea  esta novela y más porque personajes como estos los vimos con Historias del Kronen y cierta temática os resultará familiar, los personajes por otra parte me revolvieron la bilis, me cabrearon lo indecible, los chicos de papa con todo resuelto que no tienen "problemas" me repatean las meninges, más todavía; si encaráis esta breve novela que es la tercera de este autor pero primera para mi si puede sorprenderos un poco más pero no tanto como anuncia al bombo y platillo la contraportada, "fascinante, "mecanismo perfecto de relojería", bla, bla, bla, ante todo debo decir mi nula capacidad empática con el personaje principal, Rubén Polo, y seguro que por eso mi sentimientos para con esta novela son tan ariscos; Rubén es un guaperas niño pera que toca en un conjunto de música allá por los finales de los 90, cuando la estética Grunje - Nirvana estaba en su apogeo, pasados unos años, Rubén trabaja en un banco, un trabajo que siempre detesto y vive con la chica más guapa del Ces, Gabi, una rubia hija de sueca por la que se desvivían todos; un encuentro casual con la antigua vocalista del conjunto, Blanca, además hermana de Nacho abrirá la espita de los recuerdos y los motivos por los que se distanciaron y que le llevaron a irse a estudiar a EE.UU. y tener que acudir a un psicólogo para poner en orden su cabeza; jugando con diálogos cruzados en distintos tiempos de los protagonistas, Javier Gutierrez teje una interesante historia trágica pero no novedosa y que tiene algunos fallos importantes en la trama pues una chica a la que se la droga con Escopolamina aunque no recuerde nada si termina en un hospital debe tener cierta dosis de recuerdos previos pero no cuento más para no desvelar la trama pero la historia de Gaby a mi me parece que hace aguas.
Los capítulos se acompañan con Cd de música y su oportuna aclaración que enriquecen nuestra memoria, o al menos para aquellos que paseamos alguna vez por Malasaña, la plaza de Olavide, etc, pero como guinda y mi pega, los niños bien parece que tienen que ser malos de una forma "diferente", en fin y esto puede enlazar en lo poco que digiero la novela negra nórdica y en su manía de buscar malvados de diván cuando no hace ninguna falta, en el mundo los hay de manual.
Como resumen, acabo desencantado con la novela, con un final previsible, con unas mujeres que parecen y son juguetes en manos de esos niñatos y que en nada se parecen a las mujeres que yo conozco y que admiro, con un tipo cobarde y sin personalidad que se hace protagonista de la historia y que tiene infinitamente menos valor que su amigo Nacho para optar por un camino.


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